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LA DEFENSA EN BLOQUE BAJO

Un equipo ganador, debe ser capaz de defender ordenadamente en campo propio en ciertos contextos de partido. Te explico la importancia de trabajar la defensa en bloque bajo y cómo aplicarla.

Gerard Gallego

6/23/20253 min read

Ayer vimos un ejemplo perfecto de algo que muchos entrenadores sabemos… pero que a veces no trabajamos lo suficiente: defender bien significa atacar bien. El Real Madrid ganó 3-1 un partido que, desde los primeros minutos, parecía ponerse muy cuesta arriba. ¿La razón? Una expulsión temprana que le obligó a cambiar totalmente el plan.

El equipo blanco empezó con una idea clara: presionar arriba, dominar el balón y asfixiar al rival en campo contrario. Pero la roja a Raul Asencio lo cambió todo. Sin tiempo para lamentos,Xabi Alonso reformuló el guion: bloque bajo, defensa ordenada, mucho sacrificio y salidas rápidas a la contra. Resultado: victoria contundente y lección táctica magistral.

Este partido nos recuerda algo fundamental para cualquier entrenador, sea cual sea su estilo: hay que estar preparados para defender con orden, agresividad e inteligencia. No se trata de renunciar a nuestras ideas, sino de aceptar que el fútbol, como la vida, cambia de golpe. Y cuando cambia, hay que tener herramientas para adaptarse.

¿Por qué es tan importante trabajar el bloque bajo, incluso si eres un equipo ofensivo?

Muchos entrenadores construimos nuestras ideas desde el balón, desde la iniciativa, desde la presión alta, jugando en campo rival. Y está bien. Pero hay contextos en los que no podremos dominar. Lesiones, expulsiones, rivales muy superiores, minutos finales con ventaja… En todos esos momentos, proteger el área se convierte en prioridad absoluta.

No vale con pedirle al equipo que se junte atrás. Si no hemos trabajado antes los principios defensivos que requiere un bloque bajo, ese cambio de plan será un caos. La línea se hundirá demasiado, los espacios entre líneas serán enormes, y cada centro lateral será una amenaza.

Principios defensivos clave del bloque bajo

Cuando hablamos de defender en bloque bajo, no hablamos solo de colocar a todos detrás del balón. Hablamos de organización, de ocupación racional del espacio y de solidaridad sin perder estructura. Algunos conceptos clave:

1. Solidaridad y ayudas defensivas

El equipo debe reducir los espacios entre líneas y defender en zona. En ciertos momentos, necesitaremos generar superioridades numéricas a nivel defensivo, reduciendo las posibilidades de que el rival pueda progresar.

2. Proteger el carril central

El objetivo número uno: evitar que el balón entre por dentro. Cerramos pasillos interiores, orientamos al rival hacia fuera y a partir de ahí…

3. Basculación conjunta

La basculación no es solo correr de un lado a otro. Es moverse como un bloque, coordinados, y con el objetivo de crear superioridades numéricas o acumular jugadores en la zona de progresión del rival.

4. Trabajo de la línea defensiva

La última línea debe estar bien sincronizada. Saber cuándo dar un paso adelante y cuándo hundirse para proteger el área. Vigilancia constante a la espalda y a los movimientos de los puntas.

5. Defensa del área

Cuando el rival logra llegar a línea de fondo, ya no hay margen de error. Aquí entran conceptos como:

  • Marcajes individuales con correctos perfilamientos.

  • Bloquear posibles disparos o remates.

  • Controlar segundas jugadas y anticiparse a rechaces.

  • Atacar el balón con decisión y despejar lo más lejos posible.

6. Salida tras recuperación

Lo mejor es que el bloque bajo no implica renunciar al ataque. El rival nos va a dejar mucho espacio en su campo para poder contraatacar con peligro. Por eso, las transiciones ofensivas tras robo son clave: ganar metros, sacar al equipo del área, respirar y, ser letales a la contra.

Trabajarlo en el día a día

Pero no nos sirve con tener claro el plan. Debes entrenarlo, introducirlo en tu modelo de juego, aunque seas un equipo que normalmente presione alto. Algunos entrenadores evitamos el bloque bajo por miedo a renunciar a nuestra identidad, pero nada más lejos de la realidad. Se trata adaptarse para sobrevivir, y muchas veces, para ganar. Son muchos los momentos de partido que requieren un trabajo defensivo correcto en campo propio.

Ejercicios de línea defensiva, tareas de técnica individual, entrenamientos con inferioridad numérica o simulaciones de partido en el último tramo con ventaja en el marcador son esenciales para preparar al equipo para estos contextos.

Conclusión

Por mucho que queramos ser valientes, en el fútbol no gana siempre el que propone más, sino el que se adapta mejor. La identidad ofensiva es importante, pero solo será sólida si el equipo también sabe sufrir, juntarse y defender el área cuando toca.

Como entrenadores, tenemos que preparar a nuestros equipos para todo tipo de situaciones. Y eso empieza en los entrenamientos. Porque cuando el guión se rompe, solo sobrevive el que domina todos los registros.

Si quieres profundizar más, en mi canal de YouTube encontrarás un vídeo en el que te explico directamente todos los detalles: https://www.youtube.com/@Futbolhastaelfinal